Es mejor no opinar sobre ciertas declaraciones políticas, y me voy a explicar. Si tubiesemos que opinar sobre ciertas cosas que dicen los políticos deberíamos de tener más estómago de lo que pensamos.

Cuantos hemos oído hablar a los políticos de dinero con una facilidad tal que después nos preguntamos si son conscientes de donde sale ese dinero y si son igualmente conscientes que cada vez que abran la boca están poniendo un pastel muy importante en la boca de alguien y que muchas veces cuando van a hacer cuentas... hay que quitar ese pastel con el consecuente cabreo generalizado de la gente. Tan difícil es informarse antes de prometer nada de las cosas y solo hacer lo que se puede informando a la gente en el momento que se supone que ya se ha tomado la decisión. Este es un problema generalizado en la redacción que hacen todos los partidos de su programa, se prometen muchas cosas y después no se cumple nada, como es lógico puesto que si se cumpliese hundiríamos la economía durante meses. Pero no pueden llegar a un acuerdo entre ellos para decir que van a hacer las cosas que sean simplemente factibles, y por lo tanto que si no se cumple el programa electoral se pueda de verdad pedir responsabilidades por lo mal que se hizo, no como ahora que si se cumple un poco es algo magnífico.

También voy a hablar acerca de otras cosas que me preocupan, son las arcas públicas indefinidas?? Yo creo que un país se puede e incluso debe de tener déficit, pero siempre y cuando se gaste el dinero en algo decente. Es decente que ciertos funcionarios cobren sin aportar absolutamente nada al sistema? Se que es difícil poner el cascabel al gato pero no habrá alguna vez alguien que ponga fin a los funcionarios holgazanes, es decir que ser funcionario sea una garantía de que si se trabaja bien no te vayan a echar, pero si no es así ocurra como en todas las empresas... que te "inviten" a marcharte. Es difícil pedir esto a los políticos puesto que se arriesgarían a huelgas e incluso si no se explica muy bien paros generales, pero por lo menos que se intente cambiar la sensación de que el funcionario no hace nada, cosa que en algunos casos es cierto, esto se conseguiría haciendo que todos trabajasen sin más.